¿Qué hacer en Reinosa con niños?
Los niños son complicados de complacer, sin embargo, en Reinosa puedes encontrar más de una actividad que los dejará con la boca abierta y totalmente sumergidos en ella. Sigue leyendo para conocer las preferidas por nuestros clientes.
Realicen un paseo en globo
Este viaje en globo es una experiencia única para descubrir la naturaleza desde las alturas y vivir una mañana llena de emociones.
La aventura comienza a las 7:30 con el inflado del globo, en el que los pasajeros pueden participar.
El vuelo dura aproximadamente una hora, ofreciendo vistas espectaculares del amanecer. Luego, tras el aterrizaje y la recogida del globo, se celebra un brindis para conmemorar el bautizo de vuelo, seguido de un desayuno y la entrega de un diploma acreditativo.
La actividad requiere disponibilidad hasta las 11:30 y es necesario reservar con antelación. Y para participar, se debe medir más de 1,40 metros.
El bono adquirido debe utilizarse en un plazo de tres meses. La experiencia incluye todas las medidas de seguridad y permite disfrutar de un viaje inolvidable en familia, con la oportunidad de observar paisajes desde una perspectiva única y diferente.
Hagan una ruta en raquetas de nieve
Esta ruta con raquetas de nieve por las montañas de Campoo es una experiencia ideal para disfrutar en familia mientras se aprende a reconocer huellas y señales de la fauna local.
Adaptada al nivel del grupo, es una actividad sencilla que no requiere experiencia previa, solo una condición física normal y ganas de explorar.
Durante cuatro horas, un guía especialista acompañará a los participantes a través de paisajes nevados, eligiendo, siempre que sea posible, rutas escénicas por bosques donde se puedan observar animales en su hábitat natural.
La distancia varía entre 6 y 8 kilómetros, con un desnivel de 200 a 400 metros.
Aquí se te proporcionará el equipo necesario: incluyendo raquetas de nieve, bastones de trekking, polainas, y un tentempié con bebida caliente.
La actividad se realiza de diciembre a abril y se recomienda llevar ropa de abrigo, botas de montaña, guantes, gorro, y gafas de sol.
Parque de Cros
Situado en el corazón de la ciudad, este parque urbano ofrece amplias zonas verdes, áreas de juegos infantiles con columpios, toboganes, y balancines, y un entorno seguro para que los más pequeños exploren y se diviertan.
Además, cuenta con un estanque y fuentes que añaden encanto al paisaje, así como senderos accesibles para pasear o ir en bicicleta.
Es un lugar perfecto para hacer picnic, jugar, o solo relajarse en un ambiente familiar y acogedor.
Embalse del Ebro
Está cerca de Reinosa y es un lugar ideal para familias con niños, el cual ofrece un entorno natural espectacular con montañas, bosques, y amplias extensiones de agua.
Los niños pueden explorar senderos, observar aves acuáticas como patos y garzas, y disfrutar de picnics junto a la orilla.
En verano, las actividades acuáticas como paseos en barca o kayak son una experiencia emocionante para los más pequeños, mientras que jugar en la orilla les permite refrescarse.
Además, el embalse es una oportunidad para aprender sobre su historia, la importancia del agua, y los ecosistemas acuáticos.
Fuera de eso, los paisajes al atardecer son mágicos y perfectos para fotos familiares.
También hay pueblos cercanos con encanto y, en invierno, la estación de esquí de Alto Campoo está a poca distancia.
Museo Etnográfico
El Museo Etnográfico de Cantabria, ubicado en Reinosa en la Casa de las Doñas, es una excelente opción para visitar con niños, combinando diversión, aprendizaje, y cultura.
Este museo ofrece un viaje al pasado, mostrando las costumbres, tradiciones y formas de vida de la región a través de herramientas antiguas, utensilios, telares, y trajes tradicionales que despertarán la curiosidad de los más pequeños.
Las maquetas y dioramas que recrean escenas de la vida rural, como casas, molinos, y talleres, son especialmente visuales. Te ayudará a entender cómo era todo en la antigüedad.
Además, el museo puede ofrecer actividades interactivas, como juegos o talleres infantiles, donde los niños pueden aprender sobre oficios tradicionales. Es un espacio acogedor y familiar, ideal para que los pequeños exploren a su ritmo sin aburrirse.
La visita también es una oportunidad para que los niños conozcan la importancia de la ganadería, la agricultura y las fiestas tradicionales de Cantabria. Sin duda, es una de las actividades más enriquecedoras que puedes realizar.
Pantano de Ebro
Los niños pueden disfrutar de paseos por senderos accesibles, observar aves acuáticas como patos y garzas, y participar en picnics junto al agua.
En verano, las actividades acuáticas, como paseos en barca o kayak, son emocionantes para los más pequeños, mientras que jugar en la orilla les permite refrescarse.
De igual manera, el embalse es una oportunidad para aprender sobre su historia, la importancia del agua, y los ecosistemas acuáticos.
Los paisajes son mágicos. En especial cuando se oculta el sol. Pero si quieres disfrutarlos al máximo, aconsejamos visitar los pueblos cercanos.
